domingo, 28 de marzo de 2010

Tal vez

Tal vez deba hundir mi corazón en un mar de penas gastadas, tal vez sin saber he vuelto a morir entre tus manos heladas. Tal vez sin ilusiones vago por tu mirar esperando no llorar, sólo tal vez volveré a ver la cálida luz de tus ojos cansados en el mar.

Tal vez mirando al cielo encuentre estrellas apagadas en tu voz, tal vez entre sentimientos fundidos en tu corazón vuelvas a verme en cuarenta salones sin tu amor. Tal vez me estrelle treinta veces contra tu retrato quemado sin razón, sólo tal vez hoy vuelva a mi habitación abandonada hace tres minutos cuando me dijiste que me amabas con pasión.

Tal vez, y sólo tal vez, tu amor no fue más que una alucinación de mi corazón, una pequeña ilusión de tu frustración y un desliz de nosotros dos.

jueves, 25 de marzo de 2010

Plenilunio

Vidas nocturnas sabor a limón, labios de fresa de intensa pasión, una luna llena se viste de azul entre secretos de abril perdidos por ti. Vagabundos cansados visitan tu vida en el jardín trasero de nuestro amor ausente, dorado por un sol triste que nos da hoy un adiós eminente.

Lunas de plata ignoradas en madrugadas raras bajo parques sin luz ni salida, tus labios rojos recorren mi rostro por el lado olvidado de la noche perdida. Amores apagados duermen bajo la poca luz de una luna dormida, pintada en tu mente fatal aturdida.

Diez años de cuentos sin final dejaron huellas de dolor en tu corazón, a mil millas de un desierto frío vuelas entre sueños atrapados en espejos rotos, lejos de una tristeza hoy iluminada por nuestra luna llena de tu olvido vacío.

domingo, 21 de marzo de 2010

Déjà vu

Entre dos asientos viejos y mil desiertos helados busqué espacios en blanco de tu memoria pintada, tres roperos llenos de tu vida vacía y dos maletas listas para partir.

Entre dos momentos en cien aviones vacíos, encontré varios trozos de mi vida perdida, dos ilusiones y mil sueños quemados, encontré tus besos sobre un campo desolado.

Busco ahora en el cielo de nubes bordadas y siento un déjà vu.

Dejo un momento vivido de unas horas muertas en el patio trasero de tu casa arruinada, déjame dos pensamientos de amores cegados para nunca olvidar que no pudimos ni andar.

Hay días enteros en que busco tu risa, entre sueños extraños causados por tu aroma fortuito. Entre realidades soñadas y sueños que se vuelven reales, encuentro mil maneras de quererte de nuevo.

Busco ahora en el cielo de nubes salvajes y siento un déjà vu.

Un sueño eterno en tu ciudad sin vida, un sueño que mañana podré vivir, unos momentos que siento ya los había vivido, hoy me encuentro muerto por haberlo sentido.

jueves, 18 de marzo de 2010

Heridas

La bruma del mar busca morir frente al ocaso de tu corazón, entre imágenes olvidadas en ese cuarto todavía mal vestido. Heridas ardientes en mi piel bajo la lluvia profunda de tu vida, agonizan junto a la negra noche sin fin que me hipnotiza.

Iluminadas ciudades desiertas y ocultas entre siete poemas de amor, cierran al amanecer después de perderse en la madrugada de abrazos fingidos bajo una luna que no conocía. Entre heridas ocultas en mi corazón, que se extienden a su alrededor como patas de araña, me perdí sin una razón.

Cien heridas más vendrán, cuando me vengas a curar y me olvides al final. Heridas de un pasado contado en mil noches o más, entre tormentas de enero, cerraron cuatro años después de morir en algún lugar.

domingo, 14 de marzo de 2010

En un parque oscuro

He revivido en un día sin luz, luego de morir junto a ti. He dormido en un triste silencio y me he hundido ya sin vida, he deambulado en noches frías junto a cien botellas de melancolía.

He vendido mi alma herida a cazadores de mundos perdidos, buscando una luna amarilla que sólo pensaba en ahogar tu recuerdo en un extraño parque oscuro.

Dos años en pena y una lluvia estancada para este fin de semana, entre nueve bares desolados que me acompañan en las noches acabadas frente a tu mirada, hoy arrastran tu vida dormida hacia un balcón arruinado en un parque oscuro.

En este parque de frustraciones he tenido un sueño contigo, donde jugábamos con un amor de cristal y contábamos esta vieja historia olvidada en la oscuridad. En la banca de mis recuerdos, he encontrado una memoria en blanco donde perdí tu rostro sin sonrisa, donde perdí tu nombre entre la brisa.

jueves, 11 de marzo de 2010

Pasado

Mañanas acabadas en un año sin fin, tus mejillas se encienden en mi pasado de errores, bésame otra vez entre tus sueños cotidianos para que no volvamos a vernos en mi mundo arruinado.

Olvídame después cuando no puedas dormir, mi pasado me sigue entre huellas marcadas y mi habitación se llena de fallos atrapados. Noches robadas entre estrellas mutiladas te recuerdan unas horas de infinita oscuridad.

Mi pasado se perdió cuando te pude encontrar, tu pasado se encendió cuando me viste recordar. Mátame otra vez entre tus pesadillas de medianoche, para que no vuelva a verte en mi vida llena de sueños rotos.

Hoy, después de un largo tiempo, camino por las calles de tu amor y veo que se van borrando tus huellas tras de mí. Hoy que me tienes nuevamente, sólo recuerda que morí hace cinco años cuando te conocí.

domingo, 7 de marzo de 2010

Crepúsculo

Tu risa duerme en el mostrador de un hotel que cerró al amanecer. Una noche inmortal de encuentros de sombras de amor, guardó lo suave de tu piel cuando la dibujé. Dueña de un amor embestido por el olvido, quemaste mi mirar tras tu huida a la soledad.

Un crepúsculo desolado se pasea sin rumbo fijo cuando nos encontramos, y muestra el inicio y el fin de una noche junto a ti. Perros cansados se pasean en mi habitación al momento de probar tu aroma bajo el calor de un verano olvidado.

Secretos defraudados de un viaje hacia el sur que no encontramos, muestran que el amor no es más que un veneno fatal publicado en cien novelas de escritores anónimos con miedo a morir.

Dos canciones que ya no hablan de mí, mienten en un nuevo crepúsculo en el que te vi amarme entre trozos esparcidos de pasión que inundaron mi habitación iluminada por lo poco que quedaba de la luz crepuscular.

jueves, 4 de marzo de 2010

Estrellas Rojas

Gatos empapados por un mar de ternuras que dejaste huir junto a cien estrellas rojas que nos concedieron el deseo más fugaz, se pierden entre dos senderos de trampas mortales de oscuridad. Placeres en hoteles acabados me envuelven en la madrugada junto a un Martini de pasión.

Estrellas rojas de forma sensual tatuada en tu piel, hipnotizan mi vida artificial en un segundo más. En el encuentro más casual perdí mi voz junto al amor más averiado del bosque de ilusiones varadas. Nuestro amor fue eterno en lo más esencial de un disco de amor que nunca grabó.

Siete años sin notas en la canción terminaron en el verano azul de tu adiós. Mil estrellas rojas se perdieron en un mundo de perros sin sonrisa y libros en blanco dedicados hoy a ti.

Tu risa se pasea en mi mente como una pequeña luz de medianoche, entre sombras alquiladas de un amor sin acabar. En un encuentro irreal volvimos a pisar la misma habitación sin amanecer, y olvidamos el silencio para vivir en un pasado que se vuelve presente otra vez entre estrellas rojas de amor.